ANASTASIA SAMOYLOVA, EL TRIUNFO DEL GLAMOUR

Manjón Guinea
Manjón Guinea

Licenciado en Ciencias de la Información, Criminólogo y escritor

El hombre es el centro del universo y precisamente ha sido el hombre quien se ha convertido a sí mismo en un ser insignificante. Su existencia real se ha transformado en una especie de voraz espejo publicitario que ha terminado por devorar su presencia. Así son las fotografías de Anastasia Samoylova. La figura humana que aparece en sus fotografías es una especie esquiva y amenazada, un paseante solitario que ha sucumbido al triunfo del consumismo, la especulación y el lujo.

La promoción de viviendas en construcción, la publicidad de las nuevas tecnologías, el destello de las joyas y el propio olor que parece que se emiten como efluvios de los perfumes anunciados en una secuencia de collages de vivos colores, terminan por imponerse como una tenaza de tintes y pigmentos sobre el ser humano.

Samoylova pretende, con su fotografía, sumergir al espectador en un escenario de fantasía, de tonalidades seductoras, y frente a ese esmalte casi fosforescente expone la condición de una especie amenazada, el hombre, ante el consumismo y la especulación.

SEX SHOP ZURICH.AANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre
SEX SHOP ZURICH.
AANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre

Quizá una de sus fotografías que, a mi parecer, mejor evidencie esa idea sea Sex Shop, Zurich 2021. En ella se observa el cuerpo medio desnudo y andrógino de un ser (sin vello en el pecho) y con un torso delicado, físicamente intermedio entre un hombre y una mujer que parece escapado del Banquete de Platón, pare terminar en un puticlub de alto standing de Zurich. Su cabeza se muestra borrada por un plano en superficie que consigue mayor nitidez ante quién contempla la fotografía. En dicho esbozo asoman arrogantes una grúa en construcción y unas superficies de ladrillo y acero que soportan estructuras y parecen tensar la cúpula de un depósito en piedra o granito. Es como si el humano (hombre o mujer) hubiese sido prostituido frente al poder económico del ladrillo y la especulación.

En Luxury Tokio Advertisement, Tokyo 2022, Anastasia nos muestra una fotografía dividida en dos secciones. En una de ellas aparece una joven que camina con una chaqueta tweed y un bolso de marca adivinada por sus colores corporativos y sus logotipos. El rostro de esa persona que camina, probablemente hacia el trabajo, no importa. Aparece recortado del encuadre. Frente a ese plano, frente a esa mujer, se alza una amalgama de cables eléctricos. Columnas y cadenas de amarre en suspensión que contaminan el paisaje con sus innumerables hilos de cobre y bobinas. Tras dicho cableado puede apreciarse a un hombre de rostro indefinido, asustado, desesperado, e incluso llevado por la ira hasta el punto de emitir un grito sordo de auxilio.

En Graffit Barcelona 2022, se contempla a un joven que baja una rampa en la calle y frente a él la mirada de unos ojos enormes de mujer, con las pestanas y las cejas perfectamente perfiladas y maquilladas, que parecen mirar al vacío. A un lado de esa mirada: dos rosas azules. Al otro: una pintada donde se indica «Kapitalism is Kanibalism». Un puño golpea a una esvástica y un escrito parece indicar: «Nazi que veo, nazi que parto», como reivindicación de una organización antisistema. En la parte trasera de la fotografía se puede contemplar un tenderete de la terraza de un piso con las prendas tendidas al sol después de haberse hecho la colada. Es la conjunción de diferentes pensamientos en una misma sociedad. La de la belleza y el lujo, la de la contestataria frente al consumismo, y la del hombre de a pie que, alejado de los extremos, se debe a su vida y esfuerzo diario para sobrevivir.

Samoylova, rusa de nacimiento y afincada en Miami, Florida, es amiga de reflejar en sus fotografías ese mundo en el que se ve inmersa: el de las economías neoliberales. Filosofía de vida donde todo el mundo ansia el lujo y el glamour que, poco o nada, tienen que ver con las preocupaciones cotidianas de la mayoría de los ciudadanos.

Graffiti Barcelona 2022ANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre
Graffiti Barcelona 2022
ANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre

En Art Poster, Los Angeles 2022, el rostro de un hombre vestido de traje y corbata desaparece bajo la imagen superpuesta de una manzana mordida, probablemente una alegoría a ese consumismo tecnológico y arrogante de Apple y su magnate Steve Jobs.

En Pink Poodle, Mónaco 2022; un perro mascota teñido de rosa aparece en primer plano. Su dueño lo sostiene sobre sus piernas. Se le puede ver elegantemente vestido, aunque un tanto estrafalario, como un dandy al que le gusta llamar la atención por medio del lujo y la extravagancia. Y en Maquillaje desechado, Los Ángeles 2022; varios kits de pintalabios y perfiladores usados, pasados de moda, se acumulan sobre el asfalto, posiblemente en la franja blanca de un paso de cebra. Es la imagen moribunda del efecto de un consumismo pasajero y devorador que está condicionado por la moda sin importarte el medio ambiente ni la basura que genere.

Dijo en cierta ocasión Antonio Tabucchi que no creía en esa literatura, o arte en este caso, que no conmovía las conciencias de las gentes. La fotografía de Samoylova tiene esa pincelada de rebeldía, pero el destello de sus coloridos, el efecto cautivador de la publicidad es superior a la chispa de sublevación que pueda generar en el espectador. La propia fotografía de Anastasia termina por sucumbir al glamour de vivos colores, rascacielos y juego de reflejos, ahogando la leve llama de la insurrección en el espectador.

Quizá tenga algo que ver su pasado ruso, su presente americano.

Imágenes de Anastasia Samoylova, cortesía exposición Fundación Mapfre

 

Maquillaje desechadoANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre
Maquillaje desechado
ANASTASIA SAMOYLOVA. Fundación Mapfre

lo último del blog...

Mis libros...

Suscríbete

Para ello solo debes dejar tu nombre y tu correo, prometo no enviar correos molestos, solo os informaré de mis nuevos videos, libros, entrevistas, etc.